La séptima ronda de la temporada estadounidense de Pro Motocross tuvo lugar en Millville, Minnesota, en el icónico circuito de Spring Creek. Conocido por su superficie compacta, sus empinadas subidas y sus curvas de alta velocidad, Spring Creek ha sido un clásico del circuito estadounidense desde 1983. Tras dos sesiones de práctica cronometrada de 20 minutos, Antonio Cairoli se clasificó décimo a bordo de su Ducati Desmo450 MX.
Al inicio de la primera carrera, el siciliano de 39 años se vio involucrado en un incidente con otro piloto y sufrió una caída en la segunda curva, quedando atrapado bajo dos motos. Pudo reincorporarse varios segundos después, en última posición, con una quemadura en el costado causada por el escape caliente. Sin rendirse, Cairoli reanudó la carrera tras una breve revisión médica en pista y luchó hasta llegar a la posición 23, quedándose a las puertas de puntuar.
En la segunda manga, Tony salió con fuerza desde la parrilla y salió octavo de la primera curva. Tras perder cuatro posiciones en la primera vuelta, el nueve veces campeón mundial peleó duro para regresar al top 10. Su perseverancia dio fruto en la penúltima vuelta, cuando un adelantamiento decisivo le permitió asegurar la décima posición, que mantuvo hasta la bandera a cuadros al final de las 18 vueltas.
Esta ronda marcó la conclusión de la campaña estadounidense de Cairoli con la Ducati Desmo450 MX, con el apoyo de Factory Connection. En el transcurso de tres semanas, se recopilaron datos valiosos durante pruebas y carreras que serán cruciales para el desarrollo continuo de la moto. En los dos eventos de RedBud y Spring Creek, la última incorporación de Ducati a la línea Borgo Panigale logró dos top 10 y llamó la atención de medios, aficionados y profesionales del sector.
“La primera carrera empezó mal. Chocé con otro piloto, me caí y la moto cayó encima de mí, justo en el lado del escape, quemándome parte de la pierna. Paré para que los médicos me revisaran y reanudé porque quería terminar la carrera a toda costa para recopilar la mayor cantidad de datos posible. A pesar de estar una vuelta detrás y en el puesto 40, luché mucho y subí hasta el 23 con un ritmo sólido. Para la segunda carrera, ni siquiera estaba seguro de poder salir, pero al final todo fue mejor de lo esperado. Aguanté el dolor y conseguí acabar décimo. En las curvas a la izquierda podía inclinarme y empujar, pero en las de la derecha me dolía y no podía rendir al máximo. Es una pena porque podríamos haber tenido dos buenos top 10, pero dimos todo y recogimos mucha información importante. Ahora nos llevamos estos datos a casa y empezamos a prepararnos para el próximo desafío.”