Cuando Ducati diseñó la 1098, el objetivo principal era crear el equilibrio perfecto entre prestaciones y tradición aprovechando las tecnologías implementadas en las motos de carreras Ducati. Con su inconfundible estilo Ducati, la 1098 era una moto supersport de formas atractivas, preparada para darlo todo tanto en carretera como en circuito.
Con sus colores rojos, la 1098 hacía alarde de algunos elementos distintivos como el colín invertido, el frontal compacto, el doble silenciador situado bajo el asiento y el basculante monobrazo, típico del diseño de las motos deportivas que comenzó con la 916. Todo despojado de lo básico para contener el peso y maximizar el nivel de prestaciones.
Las motos de carretera y competición que han hecho historia en Ducati durante la última década. Explóralas todas.