El DRL tiene una construcción refinada con un ópalo que difunde la luz uniformemente. El faro se completa con dos módulos LED de doble función para la luz de cruce y la luz de carretera que permiten que la moto tenga un "look" simétrico con las luces encendidas que recuerda la nítida firma luminosa de la Panigale V4.

El parabrisas es bajo para crear una línea aerodinámica y dinámica, está conectado centralmente al depósito llevando el color de la carrocería al habitáculo, con un diseño moderno que alberga el nuevo salpicadero full-TFT en color. La protección aerodinámica está garantizada por un plexiglás de corte deportivo, regulable en altura en dos posiciones.

El asiento único para piloto y pasajero, con las dos partes delimitadas por costuras en contraste, se ha revisado para aumentar el confort del asiento, y esta modificación está marcada por un revestimiento deportivo.

El silenciador lateral es compacto, con dos salidas superpuestas, y su forma y posición baja realzan el dinamismo del colín, dejando completamente a la vista el diseño en "Y" de los radios de la llanta trasera, embellecidos como el delantero.

La vista lateral se enriquece con unos elegantes respiraderos para el aire caliente procedente del radiador de agua que recuerdan al doble extractor de los modelos Panigale V4. Los extractores traseros también actúan como tapa estética y se cierran alrededor del bastidor quedando ajustados para acentuar la sensación de moto estrecha en los laterales. El carenado inferior se prolonga ahora hasta el silenciador lateral, ocultando los componentes mecánicos y evocando visualmente a las motos de pista.